Los corrales de pesca de Chipiona

23 de octubre de 2023

 

Corrales de pesca deChipiona
Instituto Geográfico Nacional – Gobierno de España

Desde tiempo inmemorial se conocen diferentes artes de pesca, dos grandes grupos podrían ser, por un lado la pesca a pie (marisqueo, caña,…) y por otro la pesca desde embarcaciones que cuenta con muchas modalidades.

En Chipiona y en muchas ciudades de la costa de Cádiz existe una modalidad, probablemente milenaria según algunos estudios), que se basa en unos diques construidos frente a algunas de sus playas tras los cuales quedan atrapados muchos peces en la bajamar, esta modalidad considerada como pesca “a pie” se denomina pesca de corral y los diques forman los conocidos Corrales de pesca.

Existe bastante literatura (artículos científicos, trabajos, libros,…) sobre los corrales de pesca que describen perfectamente cómo son y cómo funcionan.

¿Desde cuándo existen?

No está demasiado claro su ubicación en el tiempo, ahí nos encontramos con un escollo porque parece conocerse la fecha a la que se remonta la pesca a pie (en la que se incluiría esta modalidad) parece que algunos milenios, pero lo que no está tan claro es cuando se construyeron y comenzaron a utilizarse los corrales que existen en las playas de Chipiona.

¿Cómo se construyeron?

Los corrales no están ubicados por casualidad en el lugar que hoy se encuentran. Su construcción sólo era viable en zonas de la costa donde existía ya una base sólida donde apilar la piedra extraída o cortada de zonas cercanas o canteras ubicadas en la misma playa. Construir un muro piedra sobre piedra en una base de arena, sujeta a oscilaciones en sus altura, haría imposible la subsistencia del muro. Por tanto los corrales están construidos en playas donde existe un fondo rocoso extenso.

¿Cómo funcionan?

Funcionan de un modo simple como grandes trampas de aprovechando el ciclo de las mareas. En pleamar el marisco, los peces y demás especies marinas entran al corral pasando por encima de los diques de piedra quedando atrapados en la bajamar, donde solo el agua puede salir atravesando las rejillas ubicadas en la parte inferior.

La eficacia de los corrales aumenta durante las mareas vivas, que se producen por el efecto de las fases lunares (luna llena y nueva) y cuando el sol, la una y la tierra se alinean provocando mareas de mayor amplitud gracias el efecto de atracción de la masa oceánica. Son varios los utensilios usados en esta fórmula de pesca tradicional, algunos de ellos más importantes y otros secundarios.

Al conjunto de todos estos utensilios en la jerga local se les denomina “avíos” o “trastos” y están reconocidos y autorizados para su uso en los corrales.

Las especies que suelen capturarse son la corvina, el pulpo, el choco, el boquerón, la sardina, la dorada, el lenguado, el camarón, además del cangrejo y el erizo.

¿Quiénes pueden usarlos?

Al menos desde el siglo XIV, la actividad en estos corrales estuvo regulada mediante concesiones señoriales. En cada corral hay un catador, responsable de su mantenimiento y elegido entre los candidatos de la asociación Jarife. Solo se puede pescar en los corrales si de dispone del permiso correspondiente y si uso implica la adecuada formación y responsabilidad para respetar el ciclo de la vida de las especies. Es importante saber que las capturas en los corrales de Chipiona se destinan al autoconsumo, no pueden comercializarse al ser no ser una actividad profesional.

¿Cuántos corrales hay?

Existen nueve corrales de pesca en Chipiona:

  • Hondo, Chico, Canaleta del Diablo y Mariño en la playa del Camarón.
  • Nuevo, Cabito y Trapillo en la playa de Las Canteras.
  • La Longuera en la playa del Muelle.
  • Montijo en la playa de Montijo.